Para orar Lc 15
Señor y Dios nuestro,
que nos amas y nos buscas.
Continuamente estamos marchando de tu casa 
en busca de cosas que nos plazcan más. 
Aun así, siempre acudimos a ti 
como “los mendigos del cielo” que somos, 
para rogarte que no ceses 
de hacerte en encontradizo con nosotros, 
pues nada somos sin Ti. 
Somos una oveja desperdigada y solitaria 
que anhela escuchar el silbido del 
pastor para trotar en su busca.
Reúnenos Padre, a la sombra de tu solicitud. 
Asístenos por medio de tu Espíritu, 
para que por nuestras obras, 
tus hijos crean en Ti. 
Amén.
 

