CARTUJO CON LICENCIA PROPIA

jueves, 27 de diciembre de 2012

SAGRADA FAMILIA - ORACIÓN


Fiesta de la Sagrada Familia Jesús, María y José




+.En el nombre del padre del hijo y del ...
-lectura de monición por un laico y seguidamente...

*Poema para comenzar la eucaristía.
Un día más o menos en familia
         Sobre la mesa están el agua, el vino,
         los cubiertos, el pan, la loza nueva.
         Hoy ha salido el sol y, en cuanto funde
         la mucha nieve –sucia ya de ayer-,
         acaricia el blancor de los manteles
         y arranca chispas del cristal.
         Llegamos ante la mesa familiar y, mudos,
         vamos tomando asiento:
cinco seres de Dios,
en esta casa que ahora empieza
a conocernos y a ser nuestra
- un hombre, una mujer, tres hijos-,
silenciosamente,
vamos cumpliendo un viejo rito,
uniendo nuestros claros eslabones
a la cadena del vivir.
Aroma la hierbabuena,
cuando voy sirviendo, humeante la sopa.
Tomo luego un pedazo de pan y,
mientras gozo repartiendo, digo:
“Dios, bendice este techo, esta mesa, este alimento,
este poco de lumbre y este mucho amor”.
Y es una música celeste el leve son
que inician las cucharas.
Esta es la grandeza de saber compartir.
                                                                  (Carlos Murciano)

Y sigue el sacerdote diciendo:
            Hermanos, como familia unida que somos y unidos a todas y cada una de las familias que pueblan el mundo; sin importar de que clase social, etnia, genero o condición determinada; reconozcamos ante Dios nuestro padre y ante nuestros hermanos todos nuestras faltas y pecados. Respondemos: te pedimos perdón, Señor.
         Por el cinismo de nuestras relaciones humanas...
         Por la doble personalidad con que actuamos...
         Por la dureza de nuestros juicios implacables...
         Por no implicarnos en lo social para mejorar el mundo...
         Por ser cobardes a la hora de ser cristianos...
         Por nuestras escasas relaciones contigo...
Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. Amén.

Alabemos ahora la grandeza de Dios diciendo todos unidos:
         Gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los ahombres que...

Oración colecta en el libro de la sede.

*Para bendecir el pan y el vino(Leemos todos)
        Bendito seas, Señor, Dios nuestro, Rey del universo,
            que haces brotar espigas en los campos de trigo
            y racimos de uva en los llanos y recuestos.  
Gracias a tu bondad, no nos falta el alimento.

Tú nos sacias con pan y vino,
fruto del trabajo compartido por el hombre y la mujer.
Bendito seas porque nos has dado la vida,
nos la conservas y a todos das sustento.

Éste es el pan de cada día,
extraído de los granos de trigo
para que los comensales lo saboreen
sabroso, crujiente, partido y repartido.

El sacerdote mantiene el pan elevado ante el pueblo 
mientras dice con la comunidad:
Éste es el pan de los pobres, pan de vida,
sólido en su firmeza, tostado por el fuego,
comparable a nuestros cuerpos.
Bendito seas, porque el pan es comida de hermandad,
festín nupcial de los que buscan la verdad.
Bendito seas por siempre, Señor.

El sacerdote mantiene el cáliz lleno de vino elevado ante el pueblo
mientras dice con la comunidad
Éste es el vino extraído de los granos de uva
para que los comensales lo beban
como signo de triunfo, alegría y esperanza.
Es vino del Espíritu, comparable a la sangre.
Bendito seas por permitirnos renovar la nueva alianza
y jalonar los días de trabajo con fiestas anticipadoras
de un banquete de bodas, con cantos y danzas.
Bendito seas por siempre, Señor.

Después de la comunión se da lectura a la siguiente oración
*Oración a Stma. María reina de la familia.
Santísima Virgen María, hija de Dios padre, madre de Dios hijo y esposa del Espíritu Santo. A ti acudimos para que nos ayudes a dar gracias a Dios por el don de la familia. Ayuda a los esposos, da fortaleza a los padres, protege y guía a los hijos. Para que con tu esposo San José y tu Hijo Jesucristo, seáis para la familia cristiana luz y aliento en las dificultades, esperanza y alegría en los momentos de felicidad. Que todos los días de nuestra vida sirvan para bendecir a Dios y darle gracias por tu Hijo y hermano nuestro Jesucristo. Amén.
Nuestra Señora de los hogares, ruega por nosotros


Parroquia de San Sebastián
Delegación de Liturgia. Domingo Infraoctava de Navidad