CARTUJO CON LICENCIA PROPIA

jueves, 10 de noviembre de 2011

NOS BASTARÁ

NOS BASTARÁ
Nos debería de bastar un poco de agua; para junto a la medida de harina, amasar juntos en fraternidad.

Nos debería de bastar, subir al moderno metro de Madrid; para advertir rostros sumidos en el desanimo y la adversidad.

Nos debería de bastar, la visión de un vertido petrolífero o un anónimo papel arrojado en el suelo; para ser conscientes de la necesidad de respeto hacia la ecología y la biodiversidad.

Nos debería de bastar un poco de ruido “discotequero”, o estruendo de coches; para ansiar el silencio y la soledad.

Nos debería bastar, con el ansia insaciable de consumo; para anhelar el principio de la responsable libertad.

Nos debería bastar, una lágrima en un rostro humano; para ser en el otro de Dios la ternura y la sensibilidad.

Nos debería de bastar, una sola mujer maltratada; para juntos gritar ¡¡basta ya!!

Nos debería de bastar, un momento de vida contemplativa; para degustar la grandeza de Dios en el todo de nuestra vida.

Nos debería de bastar, un abrazo grande, apretado y generoso; para satisfacer nuestro afán de comunidad.

Nos debería bastar, la injusticia de tantos muertos y desaparecidos; para juntos enterrar el terrorismo y toda su maldad.

Nos debería bastar, un resto de lentejas en un plato; para ser conscientes de las hambres que en mundo hay que mitigar.

Nos debería bastar, el beso apasionado de dos hombres; para conocer que los limites del amor de extienden mas allá del amor heterosexual.

Nos debería bastar, una sonrisa anónima en mitad de un campamento de refugiados; para saber que es posible la esperanza y la caridad.

Nos debería bastar, el que toda mujer pueda votar libremente; para saber que esta concluido un cambio de mentalidad.

Nos debería bastar, el amor y el respeto a nosotros mismo; para desde ya comenzar a respetar.

Nos debería bastar un Dios apasionado; que en mundo siempre nos ama, y en el otro nos buscará.

lunes, 7 de noviembre de 2011

TU VOTO, MI VOTO, EL VOTO. ELECCIONES EL 20-N

Tu voto, mi voto, el voto.


"No coartemos la libertad de nadie ni le juzguemos de ante mano, pues nadie esta en posesión de la verdad plena. Esta verdad la construiremos entre todos"

Como comprenderán, no estoy conjugando ninguna declinación verbal ni nada por el estilo. Se me ocurre este titulo, para referirme en esta tarde de pre-debate electoral a la campaña y política de nuestro país. De manera muy general, desde luego.

Esta noche tenemos enfrentados en televisión al los lideres del socialismo y el conservadurismo, aspirantes al gobierno de España respectivamente. Aunque parece cantado el resultado de los comicios el 20-N. Quizás debiéramos de ser más inteligentes y ahorrarnos el presupuesto de la campaña electoral, en “pastillas para el dolor ajeno” de Médicos sin fronteras, en favor de proyectos de desarrollo en países subdesarrollados. Puede que nos fuera mejor.
Pero la vida democrática marca sus pautas, y es lo que toca en este momento en la sociedad española. Bendita democracia, la cual aliento y bendigo desde mis escuetas posibilidades laicales.

Pero en esta tarde, quizás lo que pretendo desde este blog es referirme –con total serenidad-, a las dosis de crispación que unos y otros aportamos a la campaña electoral. Esta debiera ser pacifica en términos generales, pues se ejerce un derecho por parte de la ciudadanía, que vota a sus gobernantes.
Pero desde hace días, tanto unos como otros, recibimos y enviamos una sarta de correos electrónicos y “recachendes” electorales, que parece fuéramos a influir efectivamente en la orientación del voto de algún sujeto.

La mayoría de los emails que nos enviamos, no están arengados desde ninguna fuerza política definida, sino a través de asociaciones de ideas congéneres a cada uno de los partidos, sean de derechas o de izquierdas. El centro, políticamente hablando ya sabemos que no existe.
Llegado a este punto, opino que para algunas personas, algo muy ocurrente para defender la orientación del voto es la religión. La religión o mejor dicho, la moral religiosa que cada cual contemple, puesto que el fin de la religión no es otro que conectarnos con el Ser Transcendente al que llamamos Dios.
Pero la moralidad es orientativa y casi malévola –me atrevo a decir-, ya que en la mayoría de los casos no está definida sobre la coherencia responsable, sino sobre la base de nuestra conciencia, la cual puede cambiar aunque sea con un simple resfriado. En una losa de 20x20 se da un sujeto la vuelta, y donde dije digo, digo Diego, y lo antes blanco ahora es negro y etc.

Desde mi punto de vista, ¿qué debe influir auténticamente en el sentido u orientación de nuestro voto? ¿Las promesas electorales de los postulados a gobernar? José Luis Rodríguez Zapatero lleva años apostando por la reducción del paro, y salvo algún altibajo esperanzador, baja y baja hasta los casi cinco millones de parados. Mariano Rajoy Brey admite que lo bajará, pero sus políticas una vez en el poder se reducirán a la actitud de Cameron en Inglaterra: -“no me es posible cumplir mis propósitos electorales, pues el estado esta peor de lo que esperábamos”


Y entonces, llegado a este punto casi se me ocurre que seguiremos como estamos, hasta que de una manera global la crisis evolucione positivamente.
Nuestra iglesia, en su afán maternal y por boca de sus pastores, igualmente nos marca un sendero para nuestro voto. Y creo poder decir tras la lectura del documento, que lo hacen de manera muy clara y concisa. De manera libre desde luego, se puede atender a la voz de los sacerdotes o desatenderla. Cada cual obre en conciencia, aunque la iglesia, tiene ciertas cosas, más que claras.

Por ejemplo, la Iglesia determina desde tiempo inmemorial, la separación de los poderes civil y religioso. “Dios, ha distribuido el gobierno del género humano entre dos potestades, a saber: la eclesiástica y la civil; una esta al frente de las cosas divinas; otra, al frente de las humanas. […]Dios providentísimo, que ha establecido las dos, debe igualmente haberlas ordenado convenientemente entre sí; […]tal coordinación no sin razón es comparada a la del alma y del cuerpo en el hombre.” (Immortale Dei, León XIII. 1/Noviembre/1885) 


Por otro lado, sabemos que la iglesia desde el comienzo de su existencia, se ha dejado la piel por tres cosas fundamentales. 1ª, su supervivencia. 2ª, el poder sobre el otro. Y 3ª, la evangelización. Por ello, en una carta del papa Félix II al emperador Zenón, el 1 de Agosto del 484, este deja claro que “la iglesia –desde sus sacerdotes-, tiene el poder y la autoridad para ocuparse de lo divino y de las cosas del alma.”
Pero, frente a todas estas actitudes o frentes ideológicos y de pensamiento, al final, creo que estamos solos cada uno y consigo mismo.

Y desde luego, considero un error dedicarnos a predicar o arengar de manera sistémica, ciertas políticas en contra de otras políticas, que puede resuelvan problemas o hagan la vida más fácil a algunos ciudadanos.
Les pongo el ejemplo de la familia, que desde su aparición se manifestó en contra de la píldora del día después, hasta que su hija la utilizó tras una noche fatal. Desde entonces, sobre el tema no saben o no contestan.

Lo que quiero dar a entender, es que la vida es demasiado larga o demasiado corta, para partirnos el pecho con fundamentos que son cuestionables desde variados puntos de vista, por muy refrendados que estén por políticos de altura o el mismo papa de Roma.
Inseminación “invitro”, aborto sí o aborto no. Matrimonios a la carta, heterosexual, homosexual. Métodos de prevención sexual…etc. 


Cada cual sobre estos temas, tenemos una conciencia determinada. Y seguro que más de uno estaremos dispuestos desde cada una de las orientaciones, a coger una pancarta y manifestarnos públicamente. Pero cojan el Catecismo de la Iglesia Católica y la “Nueva moral sexual” del amigo y teólogo Benjamín Forcano; y verán como definitivo en este mundo, es solamente el aire que respiramos.

Espero que entiendan a donde quiero llegar, pues no ahondaré más en el tema.
Los españoles y españolas tenemos una cita el 20 de Noviembre. Debemos elegir con generosidad y visión de futuro. Creo deseable el elegir una opción que nos mueva a la esperanza y no tal opción para castigar a tal o cual. Y desde luego, miremos el futuro y miremos a nuestros hijos y pequeños.

La evolución del mundo es imparable. La carrera por los derechos esta casi ganada.
Apostemos con una conciencia clara y responsable.

No coartemos la libertad de nadie ni le juzguemos de ante mano, pues nadie esta en posesión de la verdad plena. Esta verdad la construiremos entre todos.
Así que, por encima de todo y cueste lo que nos cueste, votemos el 20 de Noviembre.

QUE NOS PUEDE FALTAR?

SAN FLORENCIO

Bueno, hoy día de mi santa onomástica.
Florencios hay pocos, aunque todos desde luego somos buenísimos. Fuera broma -pues cada cual tiene su alma en su armario-, Florencio es un nombre bastante común en mi pequeña ciudad de Estepa. 
Por parte familiar, soy de la tercera generación que lleva el nombre de este santo. Florencio fue mi bisabuelo, mi abuelo materno y un servidor, llamado Florencio Salvador. Y hay otros en la localidad.
En cualquier caso, es un nombre que resulta afable y conocido en este pueblo de Estepa.

Hoy muy temprano en misa conventual, escuchábamos la lectura del libro de la Sabiduría. Permita Dios nuestro padre, que nos ama y nos busca; que nos asista su santo espíritu para gozar de la sabiduría, y de la responsabilidad suficiente, para ser por medio de nuestras palabras y obras, auténticos hijos de Dios. Con ayuda de San Florencio lo conseguiremos.
Buen día. Laus Deo.

Transcrito de: (Novísimo año cristiano, Don Ramón Muñoz y Andrade. Tomo Noviembre, año de 1855)

San Florencio. 7 de Noviembre

Nació Florencio en Escocia siendo de noble cuna. En su juventud abandona los placeres del mundo, abraza una vida de humildad y de pobreza, y emprende una larga peregrinación acompañado de tres santos varones, Arbogasto, Teodato é Hildulfo, con los que llegó a Francia. Dagoberto, su rey, lo recibió como un don del cielo, y nombró a Argobasto, obispo de Strasburgo. Teodato é Hildulfo lo acompañaron. Florencio se despidió de ellos y se retiro a una selva llamada Asle en el monte Vozago.

Se consagro allí a una vida eremita, de oración y penitencia, labrando la tierra con sus propias manos. Venían las reses y las fieras del monte a destruir las legumbres cultivadas. Pero el santo solitario Florencio, les mando en nombre de Dios que se detuviesen a su puerta sin hacerles destrozos en el trabajo de sus manos.
Obedecieron los animales. Dagoberto se hallaba en su palacio de Kirchesmense cerca de aquel bosque para una gran cacería. Salieron muy de mañana los cazadores con sus traíllas de perros, y en vano dieron vuelta por los montes y selvas cercanas  para encontrar caza. Llegaron fatigados al albergue de Florencio, donde vieron muchísimos ciervos y reses paradas a su puerta y cual si un poderoso encanto los sujetase. Llamaron a Florencio desconociendo su santidad, y creyéndolo un hechicero lo maltrataron y fueron a dar con él a dar parte al rey.

Apenas habían andado un pequeño trozo del camino, al llegar a una laguna por donde debían de pasar, se pararon de repente los caballos, quedando insensibles a las espuelas con que en vano los estimulaban a andar. Reconocieron su error, volvieron atrás, pidieron perdón al santo solitario Florencio, recibieron su bendición y los caballos no volvieron a  pararse más.

Informado el rey Dagoberto de este prodigio, mando buscar a Florencio con un rico sequito de acompañamiento. Florencio rehúsa humildemente el acompañamiento fastuoso en honor de su humildad y de dirige a pié a visitar al rey. Al llegar a palacio, una hija del rey Dagoberto ciega y muda de nacimiento, recobró de repente la vista y el habla, llamando a Florencio por su nombre, el que todos ignoraban. Asombrado el rey por tan gran milagro, hizo al santo donación de aquella selva y de las villas y aldeas inmediatas para que levantase, con la suntuosidad y magnificencia propia de un rey, en el sitio donde tenía su retiro, un monasterio que aun hoy se conserva y se llama el monasterio de Asle.

Al morir Arbogaste, obligó el rey Dagoberto a Florencio a que fuese sucesor de su santo amigo . doce años goberno pastoralmente San Florencio la iglesia de Strasburgo, retirándose muchas veces a su monasterio de Asle donde después de su muerte en el año 675, fue colocado su cuerpo, en el mismo lugar en que se había fabricado él mismo su primera habitación como eremita, ilustrando el Señor su sepulcro con numerosos milagros.


jueves, 3 de noviembre de 2011

José María Castillo publica "La religión de Jesús" (Desclée) Evangelio 2011/12

Me atrevo a aconsejar la compra de un libro concreto. Es cierto que usted lector, hará lo que le venga en gana. Lo cual es sugerente, pues es señal de que usted se administra su libertad. Pero leer cada día el Evangelio, de la mano del amigo y conocido José María Castillo, es un regalo que nos proporciona un deleite especial.
El deleite de advertir, que la Palabra de Dios es universal, y por ende es de todos y todas. No se la puede encadenar si dogmatizar, ni vapulear. Por ello, Castillo ofrece una reflexión realista, fresca, humanizada y coherente sobre todo lo que Jesús nos quiso decir en su vida. Muchas de esas cosas la Iglesia nunca nos las dijo, por temor a liberalizar nuestra mente y pensamiento. Ella -la Iglesia- nos ama, pero antes debemos de amarnos nosotros a nosotros mismos, pues "nadie puede amar, sino se respeta y ama a sí mismo".

José María Castillo publica "La religión de Jesús" (Desclée)

Con el objetivo de poner el Evangelio en el centro de la vida cristiana

El teólogo José María Castillo estrena libro. Un libro muy especial en su amplia colección. Se titula "La religión de Jesús" y es un comentario al evangelio diario del ciclo B (2011-2012). Una obra, publicada porDesclée, en la que al autor pone su capacidad divulgativa a funcionar. Y el resultado es un libro redondo, profundamente anclado en la realidad, escrito desde la libertad y con un único objetivo: poner el Evangelio en el centro de la vida cristiana.

Este es el texto de la contraportada
Los evangelios cuentan la historia de un conflicto mortal: el conflicto de Jesús con los dirigentes oficiales de la religión. Los sacerdotes del templo, y quienes pensaban como ellos, no pudieron soportar el Evangelio. Mientras este hecho asombroso estuvo vivo, la Iglesia fue admirada y creció.
La Iglesia fue así esperanza para los que sufren. Hasta el día en que los "hombres de Iglesia" pensaron que era mejor hacer del cristianismo una religión: "la religión que el divino apóstol Pedro enseñó a los romanos" (Código de Teodosio [emperador], 16, 1, 2. Año 380).
Así, la institución eclesiástica subvirtió el cristianismo, volviendo la espalda a la vida y al destino de Jesús, aunque el Evangelio se siga leyendo en todas las misas.
Desde entonces, el Evangelio resulta incomprensible. Y hay quienes piensan que ni cuenta la verdad, ni lo que dice sirve para la vida. Por supuesto, no sirve para la vida que llevamos los que repasamos con más interés los números de la cuenta corriente del banco que el sentido que pueden tener ahora mismo las palabras de Jesús.
PRESENTACIÓN
Es un hecho que, en la práctica diaria de la vida de la Iglesia y de la vida de los cristianos, se le concede más importancia al Catecismo que al Evangelio. Y prueba de ello es que a los cristianos -especialmente a los católicos- se les reconoce y se les identifica más por las ideas y las costumbres que han aprendido en el Catecismo, que por las convicciones, valores y pautas de conducta que puede deducir del Evangelio quien lo toma en serio y organiza su vida de acuerdo con sus exigencias.
Los niños, en la escuela, aprenden antes el Catecismo que el Evangelio. Y si un sacerdote enseña a sus feligreses cosas que no están de acuerdo con
el Catecismo, seguramente recibirá una reprimenda del obispado. Pero si la vida de ese sacerdote tiene poco que ver con lo que dijo Jesús en el Sermón del Monte, lo más probable es que nadie le llame la atención.
Este libro no pretende quitarle importancia al Catecismo. Lo que pretende es ayudar a los creyentes en Jesús a que se den cuenta -y
saquen las consecuencias que de ello se siguen- de que el Evangelio es central en el cristianismo. Porque en el Evangelio es donde descubrimos y aprendemos dónde está, lo que es y lo que representa el centro
mismo de la Iglesia y de la fe. Ese centro no es Dios.
Ni es la religión. Ni la fe. No hay más centro que Jesús mismo. Porque en Jesús, tal como lo descubrimos en el Evangelio de cada día, es donde encontramos a Dios, donde nos enteramos de cómo es Dios y de lo que Dios quiere.
Hay que decirlo sin miedo: la Iglesia pierde credibilidad, pierde fieles, pierde sacerdotes y vocaciones, pierde importancia. La Iglesia pierde
tantas cosas porque en la Iglesia se le tiene miedo al Evangelio. Es importante estudiar el Evangelio. Pero más apremiante es vivirlo. Ayudar a vivirlo es lo que pretende la breve reflexión que aquí se propone
sobre el relato evangélico de cada día.




TESTIMONIO DE DESMOND TUTU SOBRE LA HUMANIDAD

PERLAS DE PAGOLA PARA EL FINDE - ENCENDER UNA FE GASTADA

ENCENDER UNA FE GASTADA

32 Tiempo ordinario (A) Mateo 25,1-13

JOSÉ ANTONIO PAGOLA, SAN SEBASTIÁN (GUIPUZCOA).

 

La primera generación cristiana vivió convencida de que Jesús, el Señor resucitado, volvería muy pronto lleno de vida. No fue así. Poco a poco, los seguidores de Jesús se tuvieron que preparar para una larga espera.

No es difícil imaginar las preguntas que se despertaron entre ellos. ¿Cómo mantener vivo el espíritu de los comienzos? ¿Cómo vivir despiertos mientras llega el Señor? ¿Cómo alimentar la fe sin dejar que se apague? Un relato de Jesús sobre lo sucedido en una boda les ayudaba a pensar la respuesta.

Diez jóvenes, amigas de la novia, encienden sus antorchas y se preparan para recibir al esposo. Cuando, al caer el sol, llegue a tomar consigo a la esposa, los acompañarán a ambos en el cortejo que los llevará hasta la casa del esposo donde se celebrará el banquete nupcial.

Hay un detalle que el narrador quiere destacar desde el comienzo. Entre las jóvenes hay cinco «sensatas» y previsoras que toman consigo aceite para impregnar sus antorchas a medida que se vaya consumiendo la llama. Las otras cinco son unas «necias» y descuidadas que se olvidan de tomar aceite con el riesgo de que se les apaguen las antorchas.

Pronto descubrirán su error. El esposo se retrasa y no llega hasta medianoche. Cuando se oye la llamada a recibirlo, las sensatas alimentan con su aceite la llama de sus antorchas y acompañan al esposo hasta entrar con él en la fiesta. Las necias no saben sino lamentarse: «Que se nos apagan las antorchas». Ocupadas en adquirir aceite, llegan al banquete cuando la puerta está cerrada. Demasiado tarde.

 Muchos comentaristas tratan de buscar un significado secreto al símbolo del «aceite». ¿Está Jesús hablando del fervor espiritual, del amor, de la gracia bautismal…? Tal vez es más sencillo recordar su gran deseo: «Yo he venido a traer fuego a la tierra, y ¿qué he de querer sino que se encienda?». ¿Hay algo que pueda encender más nuestra fe que el contacto vivo con él?

¿No es una insensatez pretender conservar una fe gastada sin reavivarla con el fuego de Jesús? ¿No es una contradicción creernos cristianos sin conocer su proyecto ni sentirnos atraídos por su estilo de vida?

Necesitamos urgentemente una calidad nueva en nuestra relación con él. Cuidar todo lo que nos ayude a centrar nuestra vida en su persona. No gastar energías en lo que nos distrae o desvía de su Evangelio. Encender cada domingo nuestra fe rumiando sus palabras y comulgando vitalmente con él. Nadie puede transformar nuestras comunidades como Jesús. 


(Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia). 

 

miércoles, 2 de noviembre de 2011

DIFUNTOS Y DIFUSOS

Día de todos los santos, día de todos los difuntos. 
Considero que tenemos un poco de “potaje” mental, pues incluimos a todos los finados en estas dos conmemoraciones.
Los difuntos tienen todos en común que son seres finados. Acabados para la vida del mundo, aunque la dimensión espiritual se mantenga durante vidas y vidas, en nuestras mentes y nuestros corazones. Digamos que, en el saco de los finados incluimos a los que no hicieron gala de humanidad, que no fueron buenos. Eh igualmente y como no podría ser de otra manera, a los buenos, que o bien eran familiares nuestros o fueron dignos de nuestra consideración o admiración.
Tenemos claro que incluso a los familiares difuntos, que aportaron a la familia algún que otro disgusto por causa de tal o cual dislate, al final de sus días todo se les perdona, como si de un último acto a favor de su memoria se tratara.

Lo cierto es que, como dije en 2010 en este mismo blog hoy es el día de las misas. Todo el que no va a misa durante el año, acude hoy pues tenemos conciencia de que es una de las pocas cosas que podemos hacer por los difuntos. Y todos estos actos –que no critico-, los realizamos pues en lo más recóndito de nuestro ser antropológico, reside el temor por no poder afianzar nuestras seguridades. ¿Qué persona en este día no se pregunta sobre su propio destino tras la vida de este mundo? ¿Qué esperamos tras la muerte?

Sea lo que fuere, en esta cuestión reside el principio de la soteriología, cuyo camino para su disfrute nos lo marco Jesús de Nazaret a lo largo de toda su vida.
¿Cómo disfrutar de una vida más allá, si hacemos la vida imposible en el más acá? Por ello esta prácticamente claro –a mis ojos desde luego-. Nadie se salvará en el más allá si no se salva en el más acá. ¿Acaso tenemos la prefiguración celestial de un sistema judicial y legislativo, por medio del cual Dios nos juzga con la premisa del perdón indefinido? Esto son fábulas para personas de una educación demasiado clásica –y validas para ellas-, pero no para quienes nos enfrentamos al mundo haciendo preguntas al aire.

Respuestas. Respuestas es la receta para combatir la inseguridad de nuestra propia salvación, pues solo al ser personas que transmites salvación, podremos llegarnos a alcanzar la plenitud de seres inmateriales junto a Dios.

Por ello, no es posible otro camino que no pase por la fraternidad, el respeto hacia la autonomía del otro. La solidaridad, el amor, la ternura y sensibilidad.
Si en este vida que vivimos no llevamos a cabo estos principios humanos y cristianos, no nos salvaremos por muchas misas que digan en nuestro nombre y muchas velas que nos enciendan.

Si el recuerdo de los que se fueron nos reconforta, recordémosles pues. Ellos fueron y son parte de nuestras vidas, y templos del mismo Espíritu que nos anima y ayuda a vivir.

Para orar

No hagáis daño a ningún ser viviente:
he ahí el camino eterno, permanente e inalterable de la Vida.
Perdono a todas las criaturas, y que todas las criaturas me perdonen.
Para todas tengo amistad, para ninguna enemistad.
Quien vive de la espada es presa del miedo.
A quien tratas de golpear no es, en verdad, otro que tú mismo.
A quien tratas de gobernar no es, en verdad, otro que tú mismo.
A quien tratas de torturar no es, en verdad, otro que tú mismo.
A quien tratas de convertir en esclavo no es, en verdad, otro que tú mismo.
A quien tratas de matar no es, en verdad, otro que tú mismo.
Todos los seres desean vivir, ninguno desea morir.
Toda arma, por poderosa que sea,
siempre puede ser reemplazada por otra superior;
pero ningún arma puede ser superior a la no-violencia.

(Oración jainista. Jainismo: religión fundada en la India por Mahavira en el s. V a.C.)

martes, 1 de noviembre de 2011

¡¡PADRE, QUE SEAMOS SERES DE LUZ!! - DÍA DE TODOS LOS SANTOS - PLEGARIA CONTEMPLATIVA

(La siguiente plegaria en la liturgia de las horas, puede situarse tras el Benedictus o el Magnificat, omitiéndose las preces y la oración final. Igualmente puede leerse de manera independiente)

¡Padre, que seamos seres de Luz!
En este día, ¡gracias, Padre y Dios nuestro
que nos amas y nos buscas!

Pues por tu hijo Jesús, el nacido en Nazaret,
nos has abierto las puertas de tu Reino;
a los pobres de este mundo,
a los que tienen hambre y sed,
a los que sufren y lloran en silencio,
a los comprensivos con la debilidad ajena,
a los limpios de corazón,
a los amantes de la paz y la justicia.

Tenemos claro que solo por medio
de la práctica del mensaje de las bienaventuranzas,
alcanzaremos la salvación,
cuyo camino nos ofrece Jesús,
muerto y después resucitado.

Al recordar hoy la memoria gloriosa
de todas las grandes personas
que se marcharon de este mundo,
y cuyo nombre resuena junto a Dios en santidad;
reconocemos el poder de Dios,
que se engrandece y brilla
en la fraterna humanidad
del hombre y la mujer de cada tiempo.

Por ello, bendito seas Padre de amor,
por todas las personas buenas que han vivido
 y viven en nuestra tierra;
ellos nos dan alegría y fuerza
en nuestro caminar hacia Ti.

Con los santos de toda nación y raza,
de todo pueblo, nacionalidad, lengua y color,
de todos los sexos, ideologías varias
y diversidades de pensamiento;
con todos ellos levantamos a ti los brazos
diciendo aquella oración que Jesús nos enseñó.
Padre nuestro que estas en el cielo…

Hoy, Señor, es la fiesta de todos,
porque la fuente de la humana santidad,
que eres Tú, está abierta para todos.

Cada tiempo, cada día y cada hora,
tiendes tu mano amorosa a toda persona
que  te busca con sinceridad.
Has enviado al mundo
a tu Hijo Jesús el artesano,
para hacernos a todos hijos tuyos,
y has derramado tu Espíritu en nuestros corazones,
para que en El te llamemos ¡Abba, Padre!

Que por la asistencia de tu mismo espíritu,
nuestra vida vaya encaminada
por senderos de luz y de justicia,
para que hagamos vida y obra
el mensaje de Jesús, plasmado
en la palabra inspirada y evangélica.

El nos amo hasta el extremo,
hasta el límite.
Demostrándonos que no existe
un mejor tributo que ofrecerte,
sino el amor bien trasmitido y bien hecho.

¡Que nos amemos, Padre bueno!
¡Ayúdanos a ello, pues la zozobra de la vida
en ocasiones se torna en hastío
que nos puede y desanima!
Dirige tu mirada sobre este mundo –tu mundo-,
que necesita ver tu santidad
descifrada en las personas y sus obras.
Purifica tu Iglesia,
para que en ella se hagan verdad
las bienaventuranzas de Jesús,
el cual amó y sirvió sin condiciones
ni reglas demasiado preestablecidas.

Mantén en tu corazón de Dios,
a todos aquellos y aquellas
a los que la vida les resulta demasiado dura o penosa.
Ayúdalos con el testimonio vivo de los que creemos en Ti.
No te olvides de nuestros hermanos difuntos,
admítelos a todos en la fraternidad
de los que ya son junto a Ti, seres de luz.

Y a nosotros,
que nos reunimos en tu nombre
o acudimos en soledad ante tu presencia,
ayúdanos a ser conscientes de lo mucho que nos das,
para saber transmitirlo a nuestros prójimos
y ser así el día de mañana,
auténticos seres de luz.
Amén.

miércoles, 26 de octubre de 2011

RECETAS DE NUESTROS QUERIDOS PASTORES, PARA QUE NUESTRO VOTO EL 20-N SEA MAS DIVINO QUE HUMANO


Otra deplorable intromisión de la jerarquía eclesiástica en la conciencia ciudadana

Federico Mayor Zaragoza, lunes 24 de octubre de 2011 WWW.ATRIO.ORG
“Los Obispos piden votar a quien defienda la vida y el matrimonio”… “El Episcopado ofrece a los católicos consideraciones que ayuden al ejercicio responsable del voto”… anunció la prensa del pasado 22 de octubre.
Una vez más, la jerarquía eclesiástica –como en el caso de la educación para la ciudadanía, que tanta falta nos hace, que tanta falta les hace- juzga aspectos situados totalmente fuera de su jurisdicción y del ámbito religioso: así, reconoce “la legitimidad moral de los nacionalismos o regionalismos que, por métodos pacíficos, desean una nueva configuración de la unidad del Estado español… aunque es necesario tutelar el bien común de la Nación española en su conjunto, evitando riesgos de manipulación por causa de pretensiones separatistas o ideológicas de cualquier tipo”.
Ya ven: evitar manipulaciones manipulando con afirmaciones que, además de ser impropias en un país democrático y aconfesional, son en ocasiones totalmente infundadas científicamente. La historia de las indebidas injerencias de la religión en la ciencia es especialmente rica en episodios que empañan la imagen de la iglesia y que no se debieron producirse si se hubieran mantenido en el espacio intelectual que le corresponde.
Recuerdo cuando en 1981 tuve el honor de asistir en la Academia Pontificia, al lado del Papa Juan Pablo II, a una sesión conmemorativa de Albert Einstein. Asistían muchos Premios Nobel, entre ellos D. Severo Ochoa. De pronto, el Papa pidió disculpas por el inicuo tratamiento que dio la Iglesia a Galileo Galilei. Cuando la religión pasa de la metafísica a la física, corre el grave peligro de equivocarse, dijo. Lo mismo sucede –añadió, porque no daba puntada sin hilo- cuando la ciencia hace incursiones en las creencias… Se refería seguramente al libro “El azar y la necesidad”. “A la iglesia le da lo mismo que la Tierra sea redonda o plana y que se mueva o no por sí misma”, me comentó… D. Severo y la comunidad científica allí representada quedaron muy satisfechos por las inesperadas explicaciones dadas por el Papa… que ya se encargó el Vaticano de ir “poniendo en su contexto” progresivamente.
Pues bien: al hablar de la defensa de la vida –que todos queremos defender pero no sólo en el nacimiento sino a lo largo de toda la existencia- el Padre Martínez Camino no se olvida de recordar “el peligro que suponen determinadas opciones legislativas que no tutelan adecuadamente el derecho fundamental a la vida de cada ser humano, desde la concepción hasta la muerte natural”. Los científicos hemos prestado toda la atención que se merece el origen del ser humano. D. Pedro Laín Entralgo y D. Xavier Zubiri publicaron reflexiones muy profundas al respecto. Yo mismo, ya en los 80, publiqué un trabajo sobre las implicaciones, en las prácticas para vencer la infertilidad, que pueden tener cuando se realizan con los genes pero no en los genes…
Unos años más tarde, en 1992, inicié como Director General de la UNESCO, alarmado por la posibilidad de que la ingeniería genética pudiera lograr el perverso sueño de Hitler y Mengele, que no habían alcanzado con la genética mendeliana, un proceso de consultas a todos los especialistas que, con la creación de una Comisión Mundial de Bioética, desembocó en 1997 en la Declaración Universal del Genoma Humano, en cuyo artículo undécimo se prohíbe taxativamente la clonación de genes humanos con efectos reproductivos.
En 2003 publiqué, como coordinador junto a Carlos Alonso Bedate, S.J., el libro “Gen-Ética”, donde se aportan los datos y conocimientos que permiten abordar con rigor los temas relacionados con el fantástico progreso de la expresión genética y regulación epigenética.
Por todo cuanto antecede, como creyente y miembro de la Iglesia “del Evangelio y de las sandalias”, según expresión del Obispo Pere Casaldáliga, protesto enérgicamente de esta nueva e intolerable intromisión de la jerarquía eclesiástica, aduciendo aspectos en los que la Conferencia Episcopal es absolutamente incompetente, cara a las próximas elecciones.
También se refieren a la homosexualidad (tema en el que harían bien en mantener una gran discreción) y a la asignatura de Educación para la Ciudadanía, como cuestiones que deben tenerse en cuenta a la hora de decidir el voto.
¡Educación para la Ciudadanía! Para ser “libres y responsables”, como define la UNESCO, en el artículo primero de su Constitución, a las personas educadas. Seamos libres y responsables: votemos, después de reflexionar, a quienes creamos que mejor permitirán a todos los ciudadanos actuar en virtud de sus propias reflexiones, sin obediencia ni sumisión a opiniones o ideologías que limitan la grandeza de cada vida humana: su autonomía.
¡Frente a cualquier imposición y cortapisa, venga de quien venga, nosotros procuraremos ser libres y responsables!

lunes, 24 de octubre de 2011

El "Espíritu de Asís", oasis y llamamiento de la paz

EL "ESPÍRITU DE ASÍS", OASIS Y LLAMAMIENTO DE PAZ

FELIPE ORTIZ, felipe_ortizd@hotmail.com

RÍO DE JANEIRO (BRASIL).

"He elegido Asís como lugar para nuestra jornada de oración por el significado especial del hombre santo que aquí se venera —san Francisco—, conocido y venerado por tantos en el mundo, como símbolo de paz, reconciliación y fraternidad" (Juan Pablo II)

El "Espíritu de Asís"[1] es un llamado al encuentro y re-encuentro de paz entre los hombres, las naciones y las religiones, que fue inaugurado por el Papa Juan Pablo II, el

27 de octubre de 1986, en Asís, Italia. Así le llamo el Papa Wojtyla a este evento que representó el primer Encuentro Inter-religioso, celebrado en la ciudad del "Sol de Asís";[2] cuando, respondiendo a la convocatoria del "sucesor de Pedro", rezaron juntos por la paz, ciento cincuenta representantes de las doce principales religiones del mundo, en una celebración de carácter singular y sin precedentes en la historia de la Iglesia católica. Sin lugar a dudas, detrás de aquella convocación latía el interés por buscar las raíces más profundas de la paz dentro del seno de cada confesión religiosa. El encuentro de Asís reunió a católicos, protestantes, judíos, musulmanes, budistas, sintoístas, religiones tradicionales africanas, hinduistas. Todos unidos en oración para pedir la paz en el mundo en unos momentos en que las relaciones internacionales estaban marcadas por el fantasma de la violencia. Las oraciones hechas dentro de cada tradición religiosa fueron un verdadero "Pentecostés de paz" —como un canto a varias voces a manera de una polifonía de fe— y, a la vez, un kairós para buscar la armonía y la paz entre las religiones del mundo inspirados en el Hermano Francisco de Asís.[3]

A lo largo de sus más de 26 años de pontificado, Juan Pablo II, escogido en tres ocasiones la ciudad de san Francisco para orar por la paz, junto con los líderes religiosos del mundo. La primera vez fue el 27 de octubre de 1986,[4] la segunda el 10 y 11 de enero de 1993, con motivo del conflicto bélico en los Balcanes, y la tercera el 24 de enero de 2002, enmarcada por los atentados a las torres gemelas, el 11 de septiembre de 2001. En esta última "Jornada Mundial de Oración por la Paz", estuvieron presentes más de 40 delegaciones. Se dieron cita once patriarcas ortodoxos, guiados por el patriarca ecuménico de Constantinopla Bartolomé I, "primus inter pares" de las Iglesias ortodoxas, seis antiguas Iglesias de Oriente y dieciséis Iglesias y comunidades cristianas de Occidente, surgidas en su mayoría de la Reforma. Llegaron, además, delegaciones del judaísmo, budismo, Tenrikyo, sintoísmo, Islam, jainismo, sijismo, hinduismo, zoroastrismo, religiones tradicionales africanas y otras denominaciones cristianas. En estos encuentros y jornadas por la paz, la participación judía fue particularmente representativa. En el último encuentro, la delegación judía estaba compuesta por el rabino jefe emérito de Roma Elio Toaff, que estuvo en Asís con su sucesor Riccardo di Segni y otros seis representantes del judaísmo mundial, entre los que destacaron el Gran Rabino francés Samuel-René Sirat y David Rosen, presidente de la asociación «Hijos de la Alianza».

Por su parte, la respuesta islámica fue significativa también. Nunca antes habían respondido tantos musulmanes, como en esta ocasión, a una convocatoria del Papa: llegaron delegados de Arabia Saudita y Paquistán, Irán y Filipinas, Líbano, Egipto y Estados Unidos, Albania y Bulgaria, Jordania y Jerusalén, Libia, Kazajstán, Turquía e Italia. Acudió también el Gran Mufti de Bosnia Herzegovina, Mustafa Ceric. Y, por primera vez, respecto a los encuentros de 1986 y 1993, asistió una nutrida delegación islámica proveniente de Irán.

El encuentro, cuando no, más bien, el desencuentro de las religiones, es sin duda uno de los desafíos más grandes de nuestra época, [...] (sigue en eclesalia.net)

 

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