CARTUJO CON LICENCIA PROPIA

miércoles, 12 de septiembre de 2018

DECENCIA POLÍTICA POR AMOR DE DIOS


Sin dramatizar os diré que el asunto del máster de la –hasta ayer- ministra de sanidad Carmen Montón, ha llegado a sonrojarme. En primer lugar porque como persona le ha puesto en jaque, paralizando unas iniciativas muy beneficiosas para la sanidad pública española con la que esta mujer tenía un compromiso enorme. O sea, si se hubiera podido prolongar en el tiempo hubiera sido una excelente ministra de sanidad. 

"la política no es mala. la podemos hacer mala, que no es igual"

En segundo lugar admito mi perplejidad a que una persona omita a su presidente del gobierno y secretario general del PSOE, un asunto turbio y de importancia capital sobre la obtención de un máster, habida cuenta de lo reciente del asunto del máster de la dimitida Cifuentes y el entredicho en que se encuentra el cabeza del Partido Popular Pablo Casado. 

¿Acaso los políticos de primera línea no reconocen que los medios de comunicación ahondarán en sus vidas hasta que encuentren petróleo en los fondos de los rosales de casa? Por ejemplo. Tristemente la podredumbre informativa forma parte esencial para el movimiento de masas y la manipulación de la opinión del pueblo. Todo vale para obtener un voto. 
Y los que formamos el PSOE debemos ser más que escrupulosos en este momento en el que los partidos nuevos y con aires de reconquista de lo ya conquistado, como Ciudadanos, Podemos y otras hierbas; intentan defenestrar por todos los medios los valores de la SOCIALDEMOCRACIA (pretexto para hundir al PSOE). Un principio que se considera obsoleto pero que es el mejor instrumento para trabajar por la eliminación de desigualdades y la justa redistribución de los recursos públicos. 
Y por cierto, no se me caerán los anillos al reconocer que quien lo haga que lo pague. Porque yo no me comí las mariscadas que se comieron los sindicalistas a golpe de bolsillo del sindicato, ni me he quedado con dinero de los ERE ni nunca me he ido de putas ni de putos con dinero público ni con dinero propio, ni me han resuelto la vida a golpe de sobres como en el PP. 
No. No todos somos iguales. Hay mucha decencia en los partidos y desde luego en el PSOE donde hay muchas personas que nos jugamos el tipo al dar la cara por unos ideales sin recibir nada a cambio, solo por vocación de servicio público como muchos hemos demostrado durante años, entre iglesia, vecinos…etc. 
Es por ello que lamentando lo sucedido con la compañera Montón, admiro su paso atrás. Un paso que por pura coherencia muchos otros debieran de haber dado antes de que le sacaran los colores y desgastaran las siglas de su partido político. No perdamos de vista algo que me parece importante, LA POLÍTICA NO ES MALA. La podemos hacer mala, que no es igual. Pero todo lo público que tenemos y de lo que nos beneficiamos, es producto de políticas impulsadas por personas comprometidas con la sociedad, fundamentalmente socialistas. 
Educación, sanidad, justicia, administración pública…etc. Con fallos, sí, claro. Pero con unos índices altísimos de atención efectiva. Algo que conocemos muchas personas de primera mano es una hermandad o cofradía y en muchas de ellas se hace más política que en la propia política. 
Ojalá todos y todas tanto desde el plano político, religioso, sexual, humanitario o social, pongamos la decencia por encima de todo. Hagamos gala de una buena educación, unas buenas maneras. Y atendiendo a los gritos de injusticias que hay en el mundo, ser capaces de aplicar a todo lo que compete a nuestras vidas, el respeto la paz y el bien. Lo dice un socialista cristiano convencido de ambas cosas. Un saludo.