Por la cordialidad que entre las personas, nos lleva a un principio de relación fraternal.
Que fácil es llevarse mal y que mal sienta.
Que fácil es llevarse bien y que bien sienta en el espíritu interior.
Junto a esto recibo unas letras del amigo Antonio que denotan la grandeza de ver a Dios, de contemplarlo en lo cotidiano:
"A todos los que buscan experimentar algo grandioso en el camino místico, no siempre les resulta fácil entender que la sabiduría y la grandeza consisten pura y simplemente, en hacer lo que se está haciendo, con atención y dedicación, y que lo santo es lo que está sucediendo ahora, que lo único que importa es que uno haga con esmero y dignidad cuanto tenga que hacer. De este modo todo objeto, aún el más diminuto y todo movimiento y actividad que se lleven a cabo, pueden conducirnos al Fundamento Divino, porque todo, no solamente lo sagrado es excelso, es divino: cuidar el jardín, plantar flores, coser, hacer la comida, quitar el polvo.
Todo acto cotidiano puede convertirse en ejercicio, […]
El maestro Eckhart decía: Si crees tener más a Dios cuando estás en la iglesia que cunado trabajas en el campo, entonces es que todavía no lo has encontrado en absoluto."
Buenas noches.