CARTUJO CON LICENCIA PROPIA

sábado, 26 de junio de 2010

VOSOTROS ORAD ASÍ.........

En vacaciones,
somos hijos de Dios

   “Jesús, seis días antes de la pascua, se retiró a Betania,
donde estaba Lázaro, al que había resucitado de entre los muertos”.
Juan 12,1.

*Himno.

Jesús, llena mi alma de tu espíritu y de tu vida.
        penetra todo mi ser y toma posesión de él,
        de tal manera que mi vida no sea en adelante
sino una irradiación de la tuya.

Quédate en mi corazón con una unión tan íntima,
que quienes tengan contacto conmigo
puedan sentir en mí tu presencia,
y que al mirarme
        olviden que yo existo,
y no piensen sino en ti.

Quédate conmigo. Así  podré convertirme en luz
        para los otros...

Déjame predicar tu nombre con palabras o sin ellas...
        Con mi vida, con la fuerza de tu atracción,
con la fuerza evidente del amor que mi corazón siente por ti.

*Liturgia de la Palabra.
Deuteronomio 30,15-18.20
Mira, yo pongo hoy delante de ti la vida y la felicidad, la muerte y la desgracia. Si obedeces los mandamientos del Señor, tu Dios, que yo te prescribo hoy; si le amas, si sigues sus caminos, si guardas sus mandamientos, sus leyes y sus preceptos, vivirás y te multiplicarás y él te bendecirá en la tierra que vas a ocupar. Pero si tu corazón se desvía, si no obedeces y te dejas arrastrar postrándote ante otros dioses y dándoles culto, yo os declaro hoy formalmente que moriréis. Elige la vida, para que vivas tú y tu descendencia, amando al Señor, tu Dios, obedeciéndole y estando unido a él.                                                                                                     Palabra de Dios.

Salmo 8(7)
(*)Señor, Dios nuestro.
Que admirable es tu nombre en toda la tierra.
¡Oh Dios, Señor nuestro,
qué admirable es tu nombre por toda la tierra,
tu majestad se asienta encima de los cielos!(*)
Cuando veo los cielos, obra de tus manos,
la luna y las estrellas que creaste,
¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el ser humano para que de él te preocupes?(*)
Apenas inferior a un dios lo hiciste,
lo coronaste de gloria y dignidad;
le diste el señorío de la obra de tus manos,
bajo sus pies todo lo pusiste.(*)
ovejas y bueyes, todos juntos,
y hasta las bestias del campo,
las aves del cielo y los peces del mar,
cuanto surca las sendas de las aguas.(*)

+Juan 3,14-21.
Como levantó Moisés la serpiente en el desierto, así será levantado el hijo del hombre, para que todo el que crea en él tenga vida eterna». «Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su hijo único, para que quien crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna. Pues Dios no envió a su hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. El que cree en él no será condenado; pero el que no cree ya está condenado, porque no ha creído en el hijo único de Dios. La causa de la condenación consiste en que la luz vino al mundo, y los hombres prefirieron las tinieblas a la luz porque sus obras eran malas. En efecto, el que obra mal odia la luz y no va a la luz, para que no se descubran sus obras. Pero el que practica la verdad va a la luz, para que se vean sus obras, que están hechas como Dios quiere».                                                                                                                                    Palabra del Señor

*Reflexión a la luz de las escrituras.
Verdaderamente que de la misma manera que Jesús de vez en cuando se retiraba a hablar con Dios o a descansar, el hombre de hoy siente la necesidad imperiosa de tomar vacaciones acogiéndose a una gran variedad de pretextos. Exceso de trabajo o responsabilidades, estrés o agotamiento, cansancio de la rutina, ocio. Todo retiro es bueno si es sanamente deseable y para el bien propio y de la comunidad. Tengamos en cuenta que el cristiano no puede quitarse la etiqueta de hijo de Dios y colgarla de una percha hasta que se incorpore a la vida común y rutinaria. En la primera lectura se nos pide que al igual que los primeros hebreos optemos por la vida según Dios sin dejarlo de lado. Disfrutemos de todas las maravillas que Dios nos expone ante nuestros ojos para el bien de todos y para el mejor aprovechamiento posible. Como en el salmo, demos sinceras gracias por lo que a diario recibimos y que no merecemos. Y sobre todo tengamos en cuenta nuestro permanente compromiso como hijos de Dios. No nos perdamos de la casa de Dios en vacaciones porque Jesús no se entrego en la cruz de septiembre a Junio. Eucaristía y Palabra tienen que ir de nuestra mano en tiempo de ocio, porque el evangelio de Jesús no tiene necesidad de ser justificado, hay que tomarlo o dejarlo. Esta es la realidad.

-¿Eres hijo/a de Dios las 24 horas del día?
-¿Abandonas en vacaciones la casa del Padre?
-¿Eres hijo/a permanente de Dios o estas sujeto a...?
-¿cómo de fundamentada está tu fe?

*Leemos y pensamos un poco.

La vuelta a casa

Volver cada día a tu regazo.
Marchar y volver, volver y marchar.
Nuestra vida es un continuo abandono de tu casa
y de tu compañía.
Tomamos la hacienda y nos vamos,
y la malgastamos ha cambio de necios placeres.
Malgastamos el tiempo y la vida, la inteligencia,
las fuerzas, el dinero.
Malgastamos el amor...
Y no labramos continuamente tus campos,
y no cultivamos la hacienda, tuya y nuestra,
y pasamos hambre...
El hambre nos trae tu recuerdo.
¡Que vergüenza que sea precisamente el hambre,
la soledad, la falta de dinero para volver a malgastarlo!
Estómago, corazón y cartera...
Pero volvemos y te damos un abrazo apretado.
Y tú estás contento muy contento,
aunque sepas que volvemos por el hambre.
Y pones música y una buena mesa,
la fiesta de la familia,
eucaristía de retornos, abrazos y aleluyas.
¿mañana nos iremos otra vez?

*Padre nuestro con las manos apretadas.
*Oración final.(improvisada) 

Oración creada por la Delegación de Liturgia y Catequesis de la Parroquia  de  San  Sebastián en el año 2005.