CARTUJO CON LICENCIA PROPIA

martes, 16 de febrero de 2016

LA MODA DE RIDICULIZAR A DIOS

Creo que solamente me escandalizo de algo en este mundo, y es la mala educación o la falta de respeto. Y el poema “Mare Nostra” que la poetisa que lo compuso Dolors Miquel ha recitado en el Saló de Cent del ayuntamiento de Barcelona, simulando la estructura y palabras del “Padre nuestro”; lo considero una absoluta falta de sensibilidad y de respeto a muchas, muchas personas.
“Sea santificado vuestro coño, la epidural, la comadrona”, recitó la poetisa entre otras frases.
A todo aquel que esgrima la libertad de expresión, le invito a hacer un ejercicio. Imagine usted que alguien insulta gravemente a su madre, la llama hija de puta, se ríe de ella, y encima lo hace ante un aforo considerable de personas; con lo cual se quebranta la dignidad de la ofendida y de usted que es su familia. 

Tras todo esto, que alguien le diga a usted que tiene tolerarlo por causa de la libertad de expresión. ¿Estamos sacando las cosas de contesto? Pues no sé qué decir. Pero, ¿imagina alguien teniendo en cuenta el ejemplo de antes, que hay muchas personas que tienen a Dios por Padre y creen en Jesucristo y en su madre María; y lo hacen pacíficamente, sin tener que soportar la necesidad de que nadie ridiculice su creencia?

Si esto es libertad, no es libertad responsable de la cual todos tenemos que aprender, yo el primero. Y al respeto, la aceptación y la libertad, precisamente se llega por su uso y sus costumbres, y no por el ridículo ante las gentes.
¿Se atreverá la señora Dolors Miquel a recitar un poema semejante y jocoso cuyo objetivo sea Aláh o Mahona –la paz sea con él?

Sincera y pacíficamente, creo que se está abusando de la tolerancia de muchas personas religiosas, al presenciar estos espectáculos que violentan el ambiente sano en el que debe de vivir la sociedad. Actuemos todos conscientemente de la repercusión de lo que decimos, escribimos, hacemos y/o predicamos. Es demasiado fácil que nos echen en cara nuestras palabras.

Así que, tranquilidad y mesura. Hay muchas ocasiones y motivos para defender la dignidad de la mujer, como para tener que utilizar el “Padre nuestro” de manera vergonzosa.
Un saludo cordial desde Estepa en Andalucía.

imagen de: http://ccaa.elpais.com/ccaa/2016/02/16/catalunya/1455614571_649067.html